aoraciones Fundamentos Explicación
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La Virgen dijo a Santa Brígida de Suecia: «Miro a todos los que viven en el mundo para ver si hay quien se compadezca de Mí y medite mi dolor, mas hallo poquísimos que piensen en mi tribulación y padecimientos.
Este dolor final es la culminación del duelo de Nuestra Origen, y el letra de su dolor cerca de la resurrección prometida.
La Inmaculado de los Dolores nos enseña a ser fuertes frente a los sufrimientos de la vida, teniéndolos a Ella y a su Hijo como modelos de santidad
7. «He conseguido de mi Divino Hijo que todos aquellos que propaguen la devoción a mis lágrimas y dolores, sean llevadas directamente de esta vida terrena a la prosperidad eterna luego que todos sus pecados serán perdonados y mi Hijo será su consuelo y gozo eterno.»
4. "Les toparé cuanto me pidan, con tal de que no se oponga a la adorable voluntad de mi divino Hijo o a la salvación de sus almas."
Oh Doloroso e Inmaculado Corazón de María, morada de pureza y santidad, cubre mi alma con tu protección cuidadoso a fin de que siendo siempre fiel a la voz de Jesús, responda a Su inclinación y obedezca Su divina voluntad.
Purísima y atribulada Casto María: yo os acompaño todavía con piadosa y compasiva solicitud en vuestra penosa huida a Egipto, y os pido humildemente me permitáis seguiros por el santo camino de las contrariedades y tribulaciones de esta vida, para ser conducido por este trabajoso destierro al salvador orfelinato aoraciones de la virtud.
María conocía la profundidad de esta gracia: “Yo los defenderé en sus batallas espirituales con el enemigo infernal y los protegeré en cada instante de sus vidas”.
El teólogo Pablo Cervera nos explica que la Casto vivió todo dolor humano en intensidad y plenitud incomparables
¡Ah! ¡que no hay entendimiento que pueda comprender, ni fortaleza que pueda resistir la desgarradora presencia de ese cuadro desoladísimo que presenta la Casto en su amarga soledad!
Afligida y desconsolada Señora, yo la criatura más indigna de estar delante de vuestra soberana presencia, os suplico con todo abatimiento, que por vuestros dolores os dignéis ser mi Director, amparo y patrocinio, para que en el control de este día pueda acertar a serviros y agradaros, a quien me consagro y sacrifico totalmente con todas mis potencias y sentidos; y cuanto pensare, dijere y obrare, sea en recompensa de los dolores que con mis culpas os he ocasionado, y me consigáis perdón de ellas y una buena y reconocida muerte. A más.
Inexplorado María: por las lágrimas que derramaste y el dolor que sentiste al ver la crueldad de clavar los clavos en las manos y pies de tu amadísimo Hijo, y luego al verle agonizando en la cruz; para darnos vida a nosotros, llevó su pasión hasta la muerte, y éste era el momento cumbre de su pasión; Tú misma asimismo te notaríFigura vencer de dolor en aquel momento; te acompañamos en este dolor.
El tercer dolor de la Origen de Dios se relaciona con la facilidad con la que las personas son manipulables. "Es afirmar que nuestras raíces en Todopoderoso son tan tenues, que llega cierto y empieza a abuchear: ¡Crucifícalo!
La devoción de los Siete Dolores de Nuestra SeñAhora proviene de una revelación de santa Brígida de Suecia, y es suficiente simple: se medita sobre uno de los siete dolores y se reza un Pájaro María después de cada individuo.